Mientras nuestro compañero Pulisa va engrasando la maquinaria tras su lesión, otros Nocturnis nos encontramos como si de un coche se tratara, con el piloto rojo de reserva encendido. Después del esfuerzo realizado en los 101 Km. de Ronda, y en plena fase de recuperación, me he tomado una semana sabática en la que no he salido a correr. A ello tengo que unir unos días que he pasado en Málaga coincidiendo con una prueba deportiva en la que ha participado mi hijo. Me alojé en un hotel con TI (todo incluido), y ya se sabe cuando uno va a estos alojamientos..., la verdad es que bebes y comes hasta la saciedad, pues todo se te viene a los ojos y se te hace difícil de rechazar.
De vuelta a la normalidad, el pasado lunes me sentía con ganas de salir a correr, así que lo hice, y he de decir que tuve buenas sensaciones. El martes salí de nuevo, y me sentí mejor, por lo que pensé que ya estaba recuperado. Sin embargo al día siguiente me tocaba cita periódica, y solidaria, con la Hermandad de Donantes de Sangre. Una vez concluída la revisión médica previa a la extracción se pudo comprobar, al mezclar la sangre con un reactivo, que salía un líquido de color turquesa; y luego, en una máquina de mayor precisión, se pudo verificar que no podía donar al no tener los márgenes exigibles de concentración de hemoglobina necesaria. En principio, no se puede hablar de anemia, cosa que se comprobará en un hemograma que ya ha sido solicitado. Luego, le comenté a la facultativa que no tenía ningún síntoma de ello (cansancio, fatiga, palpitaciones, etc.), contestándome que no tenía que preocuparme por ello, ya que los márgenes son muy rígidos a la hora de donar y por tan solo unas décimas no estaba dentro del mínimo exigido. Personalmente creo que el sobreesfuerzo realizado en Ronda todavía nos está pasando factura, y aunque hagamos nuestras salidas a correr, debemos de ir dosificando, con sensatez, y no pasarnos de tuerca. Si la analítica ha arrojado un saldo negativo en hemoglobina es porque el cuerpo necesita más tiempo para la recuperación total.
De vuelta a la normalidad, el pasado lunes me sentía con ganas de salir a correr, así que lo hice, y he de decir que tuve buenas sensaciones. El martes salí de nuevo, y me sentí mejor, por lo que pensé que ya estaba recuperado. Sin embargo al día siguiente me tocaba cita periódica, y solidaria, con la Hermandad de Donantes de Sangre. Una vez concluída la revisión médica previa a la extracción se pudo comprobar, al mezclar la sangre con un reactivo, que salía un líquido de color turquesa; y luego, en una máquina de mayor precisión, se pudo verificar que no podía donar al no tener los márgenes exigibles de concentración de hemoglobina necesaria. En principio, no se puede hablar de anemia, cosa que se comprobará en un hemograma que ya ha sido solicitado. Luego, le comenté a la facultativa que no tenía ningún síntoma de ello (cansancio, fatiga, palpitaciones, etc.), contestándome que no tenía que preocuparme por ello, ya que los márgenes son muy rígidos a la hora de donar y por tan solo unas décimas no estaba dentro del mínimo exigido. Personalmente creo que el sobreesfuerzo realizado en Ronda todavía nos está pasando factura, y aunque hagamos nuestras salidas a correr, debemos de ir dosificando, con sensatez, y no pasarnos de tuerca. Si la analítica ha arrojado un saldo negativo en hemoglobina es porque el cuerpo necesita más tiempo para la recuperación total.
Perico
quizas todos deberíamos pasar por el medico despues de una carrera de ultrafondo
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