Ricardo Abad es un atleta aficionado, de origen navarro, que ha sido capaz de recorrer 366 maratones seguidos, movido principalmente por una causa benéfica. Con este gesta superó el Guinnes, al hacer una maratón más que el belga Stefaan Engels, y arrebatándole el record mundial de 365 maratones en 365 días. Ahora quiere llegar a los 500, pulverizando todos los registros, y lo hace después de trabajar ocho horas diarias en una fábrica. Sin duda se trata de todo un héroe que ha superado con creces al mítico Filípides.
Un año y un día corriendo maratones parece una condena, pero nada más lejos de la realidad, ya que lo ha hecho fundamentalmente por una causa solidaria. El dinero que obtenga será donado a ANFAS (Asociación Navarra de personas con discapacidad intelectual). El objetivo es lograr un euro por cada uno de los 21.000 kilómetros que recorrerá si cumple con los 500 maratones. Como si hubiera corrido de Madrid a Seúl (Corea del Sur) ida y vuelta. En la web de Ricardo Abad hay información sobre cómo colaborar con esta aventura.
Con esta "locura" desafía a la ciencia y a las voces de los médicos. Los primeros aseguran que no se deben corre más de dos maratones al año y los médicos piensan que puede dejar secuelas en su organismo, aunque no hay nada demostrado y la mejor prueba es que él sigue adelante con su proyecto. Todo un ejemplo a seguir..., ¡a ver quién se atreve!
Un año y un día corriendo maratones parece una condena, pero nada más lejos de la realidad, ya que lo ha hecho fundamentalmente por una causa solidaria. El dinero que obtenga será donado a ANFAS (Asociación Navarra de personas con discapacidad intelectual). El objetivo es lograr un euro por cada uno de los 21.000 kilómetros que recorrerá si cumple con los 500 maratones. Como si hubiera corrido de Madrid a Seúl (Corea del Sur) ida y vuelta. En la web de Ricardo Abad hay información sobre cómo colaborar con esta aventura.
Con esta "locura" desafía a la ciencia y a las voces de los médicos. Los primeros aseguran que no se deben corre más de dos maratones al año y los médicos piensan que puede dejar secuelas en su organismo, aunque no hay nada demostrado y la mejor prueba es que él sigue adelante con su proyecto. Todo un ejemplo a seguir..., ¡a ver quién se atreve!
Pulisa
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